Mi amiga me llamó para decirme que Pablo se había fijado en mí.
Lo que dicen de que cuando menos lo esperas ocurre algo maravilloso es así en nuestro caso, ya que sin esperarlo ni mucho menos buscarlo a nuestros más de 60 años nos hemos vuelto a enamorar.
Yo llevaba unos años separada de mi primer marido y padre de mis dos hijos, el matrimonio fue bien pero con el paso de los años nos volvimos unos extraños completamente, y no hacíamos nada juntos ni teníamos ningún tipo de vida en común, yo estaba siempre con mis amigas o mis hijos, él con sus amigos y sus cosas, en fin, que no convivíamos apenas y aunque fue muy duro para todos decidimos que lo mejor era separarnos.
La verdad es que nunca esperar que algo así ocurra, y más a una edad como la mía que piensas que tu marido será para siempre, que no es posible separarte a los 50, en fin, da vértigo pero si no hay amor tampoco hay necesidad de hacernos más daño. Fue mejor para todos, todo fue amistoso y ahora vivimos mejor separados.
A Pablo le ocurrió algo parecido, no llevaba tantos años separado como yo pero el motivo de su ruptura fue bastante similar unido a discusiones continuas (en mi caso no las había). Él no tenía hijos y fue más fácil para todos.
Nos conocíamos de vista ya que vivimos en el mismo barrio y más o menos te sueles encontrar en los mismos sitios, es una ciudad pequeña. Me enteré de que se había separado al poco tiempo de haberse quedado solo, lo veía ir a comprar, tomarse un café en el bar, no sonreía demasiado y cuando lo veía me daba que pensar. Recordaba mi separación… No sé cómo decir, no me resultaba indiferente, no él como hombre, que tampoco me fijaba en eso, si no el pensar en lo que estaría pasando.
Un día coincidimos en una cafetería y un amiga mía que lo conoce se paró a saludarlo, me lo presentó así “oficialmente” (como os digo conocernos ya nos conocíamos de vista) y se quedó con nostras tomando algo. Fue una tarde agradable y creo que le vino bien para distraerse. Después, por la noche ya en casa, mi amiga me llamó para decirme que Pablo se había fijado en mí.
¿En mí? ¿A mis más de 60 años? Era imposible!! Pero no os engañaré y os diré que me sentí muy halagada, creo que nadie había demostrado nunca interés por mí excepto mi marido, hacía ya tantos años que había olvidado esa sensación. Le dije a mi amiga que él también me había caído bien y ahí comenzó un trabajo de “celestineo” absoluto por parte de mi amiga.
Consiguió que quedásemos solos varias veces, y empezamos a quedar para tomar un café todas las mañanas, y algún fin de semana nos íbamos de excursión por ahí, todo fue bastante lento, o al paso que debía ir, porque los dos teníamos miedos, vergüenzas, pero también recuperamos unas ilusiones que habíamos olvidado por completo.
Pablo y yo nos enamoramos como si fuese la primera vez, o quizá mejor, porque cuando eres mayor tienes experiencias que te ayudan a ver las cosas de otra forma. Hace dos años que estamos juntos, vivimos juntos, mis hijos lo llevan bien, incluso mi ex marido lo lleva bien, al principio sorprendió a todos, pero Pablo es tan maravilloso que se ha ganado el corazón de toda mi familia y sobre todo el mío.
0 comentarios :
Publicar un comentario
Todo lo que puedas aportar para mejorar este Blog será bienvenido. Opiniones, Historias, Fotos, etc. Puedes hacerlo también a mi e-mail: charlesfrancis1953@hotmail.com
Por todo; Gracias.-
Carlos