Fue todo un engaño

El amor que sentía por él se convirtió en rabia, tristeza, decepción.

Lo conocí una noche. Ese día me pareció que era el tipo más despreciable del mundo. Después de un año llegó a las puertas de mi casa como trabajador de mi hermana. Yo tenía una relación y justo en ese momento estaba pasando por un mal momento, él se fue ganando mi amistad poco a poco y a los meses de volverlo a ver ya no me parecía que era una mala persona.

Nos volvimos muy buenos amigos y se ganó mi confianza y la de toda mi familia, yo continuaba con la relación que tenía, y sin importar que él también estaba comprometido comenzó a conquistarme. Fue tan hermoso y tan perseverante que logró que yo pasara por encima de mis principios y acepté tener una relación con él.

Iniciamos una relación muy linda “prohibida” pero era lo que yo estaba esperando en mi vida, me sentía  totalmente plena con él y él también, por lo menos eso era lo que yo pensaba, llegué a amarlo y estaba dispuesta a dejar todo por él.

Pasaron tres meses y de repente comenzó a comportarse extraño, dejó de llamarme, no me prestaba mucha atención… Decidí conversar con él para ver lo que pasaba, me contestó que estaba pasando una depresión, pero que no era nada, que me continuaba amando y ya . Continuamos pero jamás volvió a hacer el mismo.

Al tiempo me dejó, yo no entendía nada pero solo me dijo que era por un tiempo, que era porque estaba teniendo problemas con su otra relación y era para que  las cosas se calmaran. Mientras tanto yo comencé a percibir algo extraño con mi hermana y un día lo enfrenté y le pregunté si la causa de su terminación era que estaba enamorado de mi hermana, él me contesta que no y ese mismo día volvimos nuevamente.

Pasó el tiempo y tuve sospechas de que estaba embarazada de él pero gracias a Dios no fue positiva la prueba, él comenzó a tratarme mal y yo perdidamente enamorada continué luchando. Él comenzó a aprovecharse de mí, mi vida se convirtió en un completo desastre, lo que empezó como algo hermoso se convirtió en mi karma. Mi autoestima totalmente por el suelo mientras tanto él crecía más y más, se volvió super engreído, pero sin embargo él no me dejaba irme de su vida, me tenía como un yoyo, es de esas personas que se aprovechan de las personas que más los quieren.

En fin, después de nueve meses me enteré por medio de un amigo de mi hermana que él le había encontrado a ella unas tarjetas de amor de él para ella, y lo peor de todo es que la persona que con que él tenia compromiso también le encontró tarjetas de mi hermana para él. El día que me dijeron eso sentí como si el piso se me quitaba de los pies y me caí en un abismo, era increíble saber que todo lo que yo un día sospeché era cierto y lo peor era que la tarjeta más comprometedora tenía justo la fecha en que probablemente sospechábamos que estaba embarazada.

Con el dolor de mi alma lo enfrenté y él muy cínico me lo gritó en la cara, luego que confirmé eso con él hablé con mi hermana y le conté todo y ella me aseguró que no alcanzó a tener nada con él, fue tan descarado que le dijo a mi hermana que todo lo que yo le había contado sobre mi relación con él era una mentira mía para que ella lo despreciara, y que él la amaba a ella desde hacia un año y medio.

Mi pregunta es entonces para qué me enamoró, fueron momentos muy amargos en mi vida, se abrieron heridas en mi corazón que quizás nunca van a terminar de sanar, saber que la persona que yo más amaba estaba enamorado justamente de mi hermana era una cruz demasiado pesada de cargar.

Después me enteré de cosas muy terribles de su vida, al final sí terminó siendo el más despreciable de las personas. Hoy en día han pasado  justamente seis meses desde que pasó eso y todavía me pregunto cómo una persona puede ser tan mentirosa, tan miserable. El amor que sentía por él se convirtió en rabia, tristeza, decepción. Mi vida ni mi manera de pensar volvieron a ser igual.

No se dejen llevar por los sentimientos, piensen siempre un poco mas allá de lo que ven, tengan sus principios siempre delante de cualquier cosa que hagan porque si yo no me hubiese volado los míos no hubiese pasado por la peor la experiencia de mi vida. Dios no abandona a nadie y por Él es que estoy contando esta historia.